Adonde están?...revolvía todo muy nerviosa. Pensaba a toda furia..bueno, no era grave no encontrar algo que se buscaba...pero cuando eran los lentes...anteojos ...
gafas o como se les quiera llamar...la cosa era más grave..No solo eran necesarios, si no que sin ellos, la búsqueda era más difícil...volvió su sentido del humor...Anteojos para buscar los anteojos...o gafas con detectores que avisaran...o... Bueno, aquí están!
Se los puso y ya en la cocina, se dedicó a preparar la fruta para el desayuno. Otra cosa que la ponía mal! Las mandarinas prolíficas...esas que tienen más semillas que pulpa...
Volvió a su viaje mental...Por que tanto fastidio por cosas tontas como estas? Había cosas mas importantes. Perder amigos, familiares, enfermedades, penas de amor ...tantas!
Los niños. Nunca pudo soportar ver a alguien con hambre, menos a un niño ! Y sin embargo...El maltrato a los animales y la xenofobia y la maldad gratuita...y ...Bueno, basta ya!! Que manera de empezar el día, ese día que había empezado con un contratiempo...pero que la iba llevando a lugares terribles a los que no quería llegar en ese momento.
No era por frialdad. El resultado del examen médico de su marido...estaría para ese día. Tenía que estar preparada para apuntalar su ánimo, si era malo, y a festejar, si era bueno.
Ella misma estaba enferma y nunca había sentido este temor. Es que siempre es más difícil cuando se trata de los otros...al menos así lo sentía.
Sabía que hacer con su persona...pero no estaba segura de encontrar las palabras justas, cuando se trataba de otros.
Adonde me llevaron los benditos anteojos? Había un personaje del humorista Landrú que se llamaba Rogelio, el hombre que razonaba demasiado...
Dejó todo sobre la mesa. Se dispuso a esperar a su marido...y puso la mente en blanco.
Serían el corazón y la verdad, los que hablaran ese día...Ni una coma de más. Solo el amor y la fe. Para eso estaba preparada. No quería distracciones de ninguna clase...¿Oyeron , meditaciones locas? Se enteraron, objetos perdibles?