miércoles, mayo 20

Como superar la vejez


Se tiró con abandono sobre la cama. Ella le devolvió dos o tres rebotes y por un segundo vio como en un fulgor, sus saltos de niña entre las risas de su hermanito. Se quedó quieta, y reconoció los pasos de la tristeza. No, pensó, antes de que llegue, tengo que levantarme. Le costó mucho. En principio por que la cama, tan cómoda y mullida, parecía retenerla y luego por que su cintura le chirriaba como una puerta vieja. Era su famoso dolor de nervio ciático. Problemas de la vejez, se dijo.

Ya parada, y no sin esfuerzo, fue hacia la cocina. Nada mejor que prepararse un te...o algo. Para no pensar y sentarse un rato a beberlo. A veces, era cosa de dejar pasar el tiempo. No encontraba el encendedor . Otra de las cosas, no veo un caballo con jinete y todo! Lindo porvenir! se dijo.

Recordó que su vecina le había preguntado por que ponía la radio o la televisión tan fuerte...a ella no le parecía, así que seguro, también estaba bastante sorda. Hizo memoria...y sí, ya no escuchaba tanto los ruidos de la calle y las conversaciones por teléfono...eran un suplicio.

Antes, le gustaba mucho caminar. A su esposo también, así que daban largos paseos . Ahora, caminaba cuatro o cinco cuadras...y llegaba muerta!

Su psique, su espíritu joven, se había quedado en el tiempo. Pero su cuerpo le reclamaba cuidados, cada vez más.

Tenía que conseguir que los obstáculos que ponía su cuerpo...fueran vencidos por su ánimo.

El asunto, era como lograrlo.

Opción uno: ponerse a estudiar algo. Aprender algo nuevo siempre ayuda.

Opción dos: hacer algo que le gustara mucho...viajar, ir al teatro, al cine, a escuchar conciertos o ver ballet.

Opción tres: mimarse. Hacer un tratamiento de belleza, aeróbicos, comprarse algo lindo.

Bueno, para alguna de las opciones...le faltaba dinero, para otras tiempo...y salud. Sus dolores...su vista...

Decidió que la de mimarse tenías las mismas falencias de las otras...pero que podía usar otra clase de mimos. A saber: darse un buen baño de inmersión...recordó que tenía por ahí unas sales que alguien le regaló, ponerse música suave al tono, Mozart era ideal, y recostarse en su cómoda cama. Cerrar los ojos...y viajar en sueños.

Seguramente era lo más económico y no llevaba mucho tiempo...Bella forma de rejuvenecer y olvidar los achaques, pensó mientras se preparaba para el baño... y buscaba algo de Mozart.

11 comentarios:

Unknown dijo...

...Hermoso, manitaquerí, esta pesada mochila de los cuerpos que envejecen!...¿Por qué no aprenden del corazón y del alma que están siempre de fiesta?
Besos, hermanita, y la Polonesa, que levanta una barbaridad!
Te quiero!

ana. dijo...

La música y el agua son siempre aliadas del cuerpo y el alma. El tiempo siempre me parecio arbitrario y sí...suele hacer estragos en el cuerpo, pero el alma no tiene edad y aparece siempre como una de esas mariposas de la imagen preciosa que elegiste, como imagino que aparecerá en tu mirada cada vez que escribís relatos tan bellos como éste. Sigue mi abrazo, en vos. Recordalo, amiga.

Alicia M dijo...

Manitoquerí...el logro más importante en la vida...es envejecer con alegría. Nunca me haría nada para parecer más joven. Eso sí, me encantaría no tener achaques en el cuerpo para poder gozar de la juventud de mi alma. Es comprensible, no? Un beso enorme y mil cariños.

Alicia M dijo...

Ana, mi nueva-vieja amiga. Gracias por involucrarte en mis pequeñas crónicas de la vida. Si no fuera por la música, el agua y el amor, ya no estaría escribiendo lo que veo alrededor. La fuerza me la dá el alma y siempre me dice que no le haga caso al cuerpo...que es vago y algo tonto, que ella lo va a empujar...y le creo! Casi siempre lo logra! Un beso y muchos cariños...

Paqui dijo...

Querida amiga, envejecer con alegría y en compañía de los seres queridos, para mi es lo más importante. El cuerpo envejece pero la mente si está abierta y alegre, no envejece nunca.
Un besito guapa

Alicia M dijo...

Claro, Paqui! Es lo que digo. Nos quieren envejecer con toda esa propaganda acerca de la juventud a toda costa, con cirujias, pócimas, ejercicios y las historia de que ser viejo es pecado. Para mi, es la mejor época. Uno está de vuelta de muchas cosas y puede disfrutar de los seres queridos y de los amigos a plenitud. Un beso querida Paqui y gracias por no olvidarme.

La Calderón dijo...

Mi querida Alicia, no debe ser usted tan anciana, ni han de ser tantos los achaques que la aquejan, cuando tiene un gusto tan exquisito, como colocar ése galeón con velas de mariposas multicolores y a esa simpática ratita blanca que juega con el maus, y se alimenta tan graciosamente.
Es muy propio de un espíritu joven y soñador.
Me ha encantado su relato ¡¡Se parece tánto a mi vida!!
Pero sí, ¡¡Hay que seguir adelante, a como de lugar!! Aunque más no sea con un baño de inmersión y una maravillosa música de fondo para poder transportarse mejor.
Desde Monte Grande- Argentina...
Susana............

Alicia M dijo...

Susana...un gusto enorme en conocerte. La respuesta a esto de la edad, está en un comentario que te hice en tu blog. Pero me siento joven y soñadora..y con mucho para hacer, todavía. Espero que mi salud me lo permita y estoy luchando para eso...Un enorme abrazo con esperanza de que pueda ser repetido pronto.

La Calderón dijo...

Querida Alicia, te dejo el Premio Violeta en mi blog porque el violeta, es el color de la mentalidad pensante, de la lógica y de la razón. Es el color de la madurez avanzada, del equilibrio, del razonamiento concreto. Sus vibraciones provocan un mayor rendimiento de la actividad mental, y esto es algo que nos hace crecer espiritualmente, nos indica respeto, dignidad y amor por uno mismo.(He copiado el significado del Violeta, tal como me lo mandó Marga, pues no lo sabía) y quiero compartirlo.
Un abrazote…
Susana………

Alicia M dijo...

Querida Susana..Gracias por este premio tan especial...el violeta es uno de mis colores preferidos y tengo dos ambientes pintados de lila, violeta clarito, y blanco. Mi dormitorio es uno de ellos. No sabía lo que significaba! Con tu permiso...como corresponde, lo comparto con todos mi amigos de blog. Muchos cariños querida Susana.

andre dijo...

Me encanta la musica, en ella me refujio. Me paraliza el deterioro, la parálisis y la falta de proyectos.
andre, laplume.